Nos hospedamos en este hotel de estilo occidental debido a que encontramos una oferta de 5 noches a mitad de precio. De lo contrario se nos hibiese ido demasiado de precio.
Las habitaciones son amplias y están limpias, pero las camas no son demasiado cómodas. Sobre todo las almohadas, muy duras. El aire acondicionado también hacía bastante ruido. Las bebidas del minibar eran baratas, aunque no las reponían todas por alguna extraña razón. Tuvimos algún problema con los empleados de recepción, ya que no hablan inglés casi ninguno. Tampoco fue nada importante, pero no esperes que te resuelvan muchas dudas.
En general el hotel está bien. Es muy nuevo y está limpio. Tiene el metro justo enfrente a solo cuatro paradas de Shibuya y puede servir para explorar la ciudad. También tiene varios restaurantes y supermercados al lado, para comprar el desayuno (el del hotel es carísimo, 1900 jpy por persona).
En general, acabamos satisfechos, pero si hubiese pagado el precio real me habría arrepentido mucho.