La satisfacción de ver que elegiste el lugar perfecto. Eso nos paso con Cabañas La Luna. Tulum es un paraíso, y hospedarse en este lugar potencia eso al máximo.
Reservamos la cabaña Robinson Crusoe, que es bastante chica pero comoda, perfecta para una pareja. La decoración y la ambientación de todo el establecimiento es de ensueño. Estás a 15 metros de la playa, se puede pedir el desayuno para el día siguiente y tomarlo en la galería de la cabaña o bien en el deck del restaurante, que esta bárbaro. Y QUE DESAYUNO, el mejor de todos los que probamos en la Riviera Maya: el pan es esquisito, la fruta es magnífica, y la mermelada casera un manjar (De hecho preguntamos si se vendía y nos llevamos un frasco, lamentablemente no tenían más).
El restaurante es bueno y los precios están acordes a los demás en Boca Paila.
El lugar genera su propia electricidad y agua. Así y todo nunca nos falto ninguna de las dos, podíamos cargar todos nuestros aparatos y teníamos Wi-Fi en la cabaña las 24hs.
Se puede consumir en el bar o la playa y cargar los gastos a tu cuenta, lo cual te permite desconectarte del todo y ocuparte solo al final.
El staff es muy atento y simpático, siempre dando buenos consejos.
Y por último, la playa es perfecta. No hay mucha gente y las reposeras son muy cómodas.
Volveríamos seguro. De hecho la 2da semana fuimos a un All Inclusive y nos arrepentimos de no sacar las dos semanas acá.
Gracias por una semana perfecta Cabañas la Luna!