Una pesadilla, llegamos al Hotel a media noche, y nos recibe un hombre rudo, grosero con una actitud como si nos estuviera haciendo un favor por atendernos. Nos dijo que teníamos que dejarle la tarjeta de crédito como garantía, cuando en estos días eso es una práctica peligrosa. Dos horas después de comenzar a dormir, nos tocaron la puerto para decirnos si necesitábamos algo, y les dijimos que no y no se fueron, nos dijeron que sí les podíamos dar las silla que estaba adentro de cuarto¡¡¡¡¡ increíble nos tocaron la puertar a las 2 de la mañana para pedirnos una silla¡¡¡¡¡ increíble. Al desayuno al siguiente día no había hecho suficiente comida, casi no pudimos comer nada, dejamos unos trozos de pan en el tostador y apagaban el aparato, nosotros lo volvíamos a encender por que queríamos nuestro pan tostado y ellos lo volvían a apagar, esos sucedió cuatro veces, hasta que les dijimos que no hiciera eso por que estábamos esperando nuestro pan. La peor experiencia del mundo. He estado en hostales con una mejor atención, y en comparación a los hoteles en donde he estado esto es un hostal barato. Su apariencia solo puede impresionar al desconocedor.Más
- Wi-Fi gratis
- Piscina