Estuve en este hotel en mayo 2009, con un grupo organizado por ULTIMA FRONTERA, todos buceadores, nuestro objetivo era, por supuesto bucear cuanto más mejor!
El hotel es precioso, inmejorable en cuanto a servicio, limpieza, etc. Hasta el aire acondicionado funciona bien sin que se note! La comida de buffet es variada, semioriental, pero siempre muy correcta.
Para mi, siendo buceadora, el mayor inconveniente es que es muy caro, y no hay tiempo de disfrutarlo si haces 4-5 inmersiones al día, por lo que recomendaría ir a un hotel más barato, en otra isla, probablemente en Kapalai.
El segundo grandísimo inconveniente, no se refiere al hotel, sino, a la situación que se ha creado con el cupo de 120 buceadores al día en Sipadán. Nosotros tuvimos 6 días de buceo y sólo dos en Sipadán, con inmersiones locales, de poca calidad alrededor.
De hecho el manager del hotel te recibe diciendo que no te aseguran ni tan siquiera que bucees un día en Sipadán, que es cuestión de suerte y el hotel no puede influir.
Así que, aunque el buceo en Sipadán es magnífico, yo volví un poco decepcionada.
Mi recomendación es buscar otro destino y no viajar con ULTIMA FRONTERA, que no informa en absoluto de esta situación.