A las 3:30 de la tarde en pleno miércoles estaba todo cerrado. No se podía visitar nada. A las iglesias Cristianas no nos dejaron entrar por lo tener la “ropa apropiada”.

Todo el paseo fue muy interesante. Nuestro guía, Abraham conoce muchos detalles y los cuenta de manera muy amena. También nos convidó Knafeh (Gracias) Tal vez la parada en Haifa haya sido un poco corta y solo alcanzó para sacar alguna foto de los Jardines Bahai. Las grutas de Rosh Ha Nikra son impresionantes. y Cesarea también. En general, todo muy bien. Cumplieron bien con los horarios prometidos.

La Ciudad Vieja de Jerusalem me cautivó con su historia y por ser el lugar donde Jesús ejerció su vida pública. Para mí fue una experiencia espiritual más que turística, sumado a ello que la visitamos en Semana Santa lo que fue una bendición de Dios. Destacó a la Basílica del Santo Sepulcro porque estaba muy cerca del hotel donde nos alojamos y pudimos visitarla varias veces y participar de las ceremonias religiosas. Antes de dejar Jerusalem, besé la Puerta de David prometiendo volver con mi familia. Para quienes somos católicos es prácticamente una obligación peregrinar a Tierra Santa.

NO RESERVEN: nos vendieron el tour en español y no estaba disponible y el GUÍA nos grito y falto al respeto, tenían tan mala organización que nos cambiaron de bus 3 veces antes de salir pues no sabían que hacer los guías, a demás de esto salimos con horas de retraso! En verdad NO reserven aquí ( adjunto foto del guía que nos grito y trato súper mal)

Tras recogernos en nuestro hotel y llevarnos a un punto en común donde salen todos los tours, por fin salimos hacia el mar muerto, desde las 8:30 que nos recogieron no salimos hasta las 10 de la mañana aproximadamente. El guía regular, le faltaban palabras, pues el tour lo contratamos en castellano y lo dicho, no sabía muchas palabras en castellano. Llegamos al mar muerto sobre las 10:35 horad y nos dice que a las 12:00 horas tenemos que estar en el punto de encuentro. Como veis una hora y media para bañarte y darte los barros. Corriendo al bus para ir a Masada, llegamos a las 13:00 y nos dice que vamos comer que después subimos en el teleférico. ¿Pero yo he venido a bañarme y a ver la fortaleza de Masada, no a comprar productos del mar muerto ni a comer en un restaurante, ya lo haré?. Pues nada a las 14:45 horas subimos y tras un breve recorrido por la fortaleza, para abajo que el teleférico cierra a las 16 horas. Devuelta a Jerusalén. Ese es el recorrido perder el tiempo en comer y comprar. Decepción total.

Viajar a Tierra Santa como peregrino y no como turista me dió la oportunidad de aprender y valorar más mi Fe y amor a Dios, además de agradecer vivir mi bautismo como Católica.

Abarca tanto que se ve poco; y eso de incluir visita a Haifa y los jardines bahai es medio truculento. Se pasa por Haifa y se hace una brevísima escala desde un mirador desde el cual se aprecia la vista de Haifa y de los famosos jardines. Eso no es una visita, pero bueno, da una idea. Lo que si desapruebo complete te es que de pronto te llevan a un tipo mercado a comer (sin darte opción) que es sucio, feo, carísimo y sin opciones de menú; por el resto del viaje diría que esas o menos, pero de verdad que por lo de la comida es reprobable y no lo recomiendo. Busquen otra opciones

El observar las ruinas de Caesarea frente el mediterráneo impresiona como asi las ruinas de lo poco que queda de la iglesia y torre bizantina, los jardines de Haifa son hermosos aunque demasiados perfectos para mi gusto, la cuidad de Acre con sus ruinas subterraneas de la antigua iglesia bizantina es espectacular como tambien ver el mar a través de los agujeros en las rocas de Rosh Hanikra.