El paseo esta okey. Hay días que hay paradas que se saltan o se detienen en una y no avanzan más, por ejemplo la diez. Hay que tener mucho tiempo para hacerlo de manera satisfactoria con bajadas y subidas, recomiendo ir temprano y usarlo hasta que se agote el tiempo.
En lo personal, la primera y segunda vez que subimos nos atendió de mala gana una mujer de nombre Mabel, que al parecer no le gustaba que subieran Argentinos porque para con los extranjeros su trato mejoraba.
En cambio, la tercer y última vez que subimos nos atendió Eduardo qué nos recibió atentamente y con una muy buena actitud, al bajar también se despidió cordialmente.