Un ambiente de ensueño. Excelente atención. Cocktaleria nivel dios. Selección musical dificil de superar.
En Buenos Aires, la ciudad que no duerme, hay unos pocos bares que hacen honor al delicado arte de ofrecer cockteleria de primer nivel, uno de ellos es Verne Club.
Conozco el lugar desde hace algunos años y es perfecto.
Su carta de cockteleria ofrece un relato para seguir, con giros bien diseñados en sus principales tragos clasicos; el Old Fashion ahumado y el Dry Martini de la casa están a la altura de las mejores barras de Londres, New York y Milán.
Es un oasis para pasarla bien. Frenéticos abstenerse.
Les Bartenders Florencia y Gonzalo recrean el espíritu de los speakeasy de los años 30 con protocolo, arte y dedicación. Recomiendo el Old Fashion ahumado, el Dry Martini de la carta y el tapeo. Hay un sólido equipo de barra y es dificil irse de Verne. Uno quiere que la noche sea infinita.
Un reducto para volver una y otra y otra vez. Salud!