Una excursión distinta, fuera de lo común. En principio el guía que nos llevo en la 4x4, excelente, haciendo una guía participativa. Parando en el mirador con lindas vistas! Llegamos a la estancia (que es privada) y todavía era de día, nos dieron unos ponchos súper abrigados ya que hacía muchísimo frío. Otro guía (excelente) nos contó sobre los Tehuelches, sus costumbres, vimos las pinturas rupestres y me quedé fascinada con las historias sobre las mujeres de la tribu dando a luz, las guanacas que servían de incubadora y los bebés recién nacidos, así como también la expectativa de vida, un hombre de 35 años, ya era un anciano. Se aprende y se disfruta! Luego de esta primera parte llegamos a la cueva con vista al lago (ya oscureciendo). Había mesas de madera, estufas de exterior. De comer: Sopa, cazuela de cordero servida en pan, vino tinto y otra bebidas. Se podía repetir todo! Los chefs y guias, todo el personal, muy amables y serviciales, atentos a todo! Una experiencia única que súper recomiendo! Nosotros la hicimos por recomendación de mi hermano y mi cuñada que quedaron TMB encantados! No dejen de hacerla!