Lo que me gustó de esta excursión es lo que nos regala la naturaleza, Esas montañas maravillosas, con formaciones como la garganta del diablo(donde me sentí diminuta), o el anfiteatro que además de ser impactante ante la vista, lo es para el oído, con esa acústica natural, que sorprende.
Fui con la empresa Alma andina. Muy buena!!!!!!!, cumplieron con los horarios. , y la guía Belén nos brindó muchísima información, super interesante.
La ciudad de Cafayate, no me gustó. Ni siquiera pudimos conocer la iglesia, ya que estaba cerrada.
La visita a la bodega(Vasija secreta) , me pareció horrible. La explicación fue muy escueta, y la cata espantosa. Te sirven vino blanco, y antes de beber el segundo zorbo, te estan sirviendo en la misma copa el tinto, sin un poco de agua para enjuagar la copa y la boca. Imposible sentirle el sabor al tinto.
La excursión hubiese sido excelente, sin bodega, y ese tiempo usarlo para volver un rato al anfiteatro con el sol de la tarde.