La blanca es muy buena. Podría ser genial. Es, como su nombre indica, un complejo, no un hotel, así que hay menos clientes, más paz y un ambiente más relajado. Si estás buscando ser esperado en manos y pies, este no es el lugar para ti. Si quieres estar a la izquierda para relajarse y ser dado cada poco posible de ayuda, entonces que es.
Como otros ya han dicho la ubicación y las vistas son impresionantes tanto y hay muy fácil acceso a algunos de los lugares más famosos y hermosos y playas de Sicilia. Si te alojas aquí necesitarás un coche que no es opcional. Es self-catering y el mejor supermercado es el Deco en Alcamo (que está convenientemente situado cerca de la zona de cantina sociale (vinos del complejo son en gran medida locales y muchos se pueden encontrar aquí).
Bueno, ¿por qué no es genial? Es un complejo nuevo y el alojamiento, distribución, instalaciones (inc. resort amplia Wi-fi) y el personal son excelentes. Es las pequeñas cosas. Sicilia es mundialmente famosa por sus naranjas, pero el zumo en el desayuno de un paquete. No hay opciones disponibles (almuerzo dado que cada habitación tiene una cocina puede ser comprensible. El menú de la cena rara vez cambios - nos alojamos 15 noches y que ha cambiado una vez (que dijeron que la comida es excelente y lo recomiendo de todo corazón comer allí). Creo que todas estas son poco problemas que no tengo duda alguna, ya que el complejo mejorar rápidamente se convierte en más establecidos y ciertamente no presentan una razón para no visitar.
Algunas personas pueden estar preocupados de que porque es un complejo que puede sentir un poco frío. La Blanca no es eso. Tanto Serena y Federica de recepción no podría haber sido más servicial. Cada vez que necesitaba su ayuda me ayudaron con una sonrisa y me hizo lo imposible para asegurarse de que la estancia fue perfecta, Serena fue particularmente feroz al tratar con la empresa de alquiler de vehículos en mi nombre! Sin embargo, para nosotros, el corazón del complejo era Anna. Ella era siempre sonriente, dispuesto a ayudar, y dispuesto a soportar mi Italianish. Nos hizo sentir como amigos en lugar de clientes y cuando nuestra hija se hizo daño Anna estaba allí para ayudarte; ella llamó a su doctor Anna para el resto de las vacaciones. Para nosotros la sensación relajante de bienvenida en casa es la razón por la que volveré.
La Blanca podría ser mejor, pero no puedo recomendarlo lo suficiente.
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