El Hotel es mucho mejor por fuera que por dentro, la habitación es buena, el baño poco acogedor aun cuando es todo nuevo y en buen estado, lamentablemente un buen hotel es más que una habitación, en este caso el desayuno fue desastroso, nada de calidad y su disposición demasiado básica, la decoración es muy pero muy precaria, los espacios comunes carecen de todo mobiliario, los jardines son feos, solo se salva su frontis, en definitiva la relación precio calidad es mala, no volvería
Mi señora se preparó en el Hotel. Fue atendida súper bien, se preocuparon de los detalles para que la maquilladora pudiera trabajar cómoda. Nos recibieron con Champaña y bombones. Muy buen servicio, se agradece cada detalle
Visitamos este lindo hotel por una salida a terreno por parte de la universidad (UDLA), quedamos encantados, esquicito servicio, muy cálido, nos improvisaron un menú sin ningún problema, los chicos que nos atendieron el chef y el garzón junto con Ana María un 7, 100% recomendado y para volver por supuesto...
Estuve por asuntos laborales, aún así pudimos compartir con mi familia una cena de lo más gourmet . Habitaciones calefaccionadas, bien equipadas y su cama cómoda. El desayuno es buffet tradicional y es bien generoso. Excelente servicio a los clientes... Espero volver pronto un fin de semana...
Hemos estado en el Hotel por tercer año en verano viajando 1100 kilómetros para descansar aproximadamente en la mitad del viaje. Existe buena y cálida atención desde que hacemos las reservaciones hasta las explicaciones por un desayuno que no estuvo a la altura por haber estado completos. Agua, gaseosas, cervezas, maní, chocolates y lo habitual de un frigo bar de habitacion, en unas vitrinas cercanas a la recepción. Habitaciones de buen tamaño, con adecuado baño donde todo funciona. Solo mencionar que en pleno verano, San Fernando es lo suficientemente caluroso para justificar la inversión en aire acondicionado, lo que lo haría perfecto. Desayuno con te, café, infusiones, jugos diversos, leche, diversos panes, mantequilla y margarina; huevos a pedido pero incluidos en el cobro, queso fresco, jamón, queso, salame; kuchen, torta, brazo de reina y otros dulces. En suma, un encantador hotel para descansar tras muchas horas de conducción, pero supongo también para ir a trabajar en el área, donde uno se siente bien recibido, bien tratado y con ganas de volver. …
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