Cavas Wine Lodge es una magnífica elección para los viajeros que visiten Lujan de Cuyo, ya que ofrece un ambiente de lujo, además de numerosos servicios diseñados para mejorar tu estancia.
Disfrutarás de agradables habitaciones que incluyen televisor de pantalla plana, aire acondicionado y minibar, y podrás estar conectado durante tu estancia, ya que Cavas Wine Hotel ofrece wifi gratuito a los huéspedes.
El hotel tiene recepción abierta 24 horas, conserje y terraza en la azotea. Además, Cavas Wine Hotel ofrece piscina y desayuno incluido para poder relajarte tras un ajetreado día. Hay parking gratis disponible para huéspedes con coche.
Lujan de Cuyo también se conoce por sus galerías de arte, como Gonzalo Anton Atelier, que no se encuentran muy lejos de Cavas Wine Hotel.
¡Disfruta de tu estancia en Lujan de Cuyo!
por lejos la mejor experiencia vivida en relacion al servicio, estan pendientes de cada detalle, cada parte del servicio tiene un factor sopresa que sin duda logran hacerte sentir especial, las habitaciones son comodas pero insisto que lo que marca el verdadero resultado es el estar atentos a cada detalle
Lo que mas llama la atención es el hotel, nosotros fuimos solo a almorzar pero podes caminar por los viñedos, es divino y tenes muy linda vista a las montañas. La atención fue muy buena también. Pedi el menu de 3 pasos, la comida no se destaco. Hay opciones veggies y sin tacc.
Hotel de lujo y excelente atención por parte del personal. Vistas maravillosas, desayuno perfecto, habitaciones impecables, detalles pensados para un increíble relax. el servicio de conserjería organizo la estadía y actividades de manera ágil y profesional.
Disfrutar de unos días en Cavas es una experiencia espectacular. Todo es lindo! Desde el entorno ... la recepción ... y ni hablar de las casitas entre los viñedos. Buen gusto. Soñadas! y con TODO para que nada falte y la experiencia sea ÚNICA!
Cavas está ubicada en un lugar maravilloso, con vistas a las montañas y a los viñedos. Las cabañas con hermosas, grandes, súper cómodas, bien climatizadas, con una terracita privada con chimenea. Desde que llegas, todo la gente te sonríe, te atiende con amabilidad, tratando de hacerte feliz en todo momento. La comida es súper rica, el desayuno es excelente, con productos caseros, y variedad de productos sin gluten. El spa es hermoso. No se les escapa un detalle!!! Es imposible no queres volver. La gerente, Verónica, es súper amorosa y amable. Todos te hacen sentir como en una gran familia!! FELICITACIONES A TODOS!!!
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