Es la típica habitación donde piensas que podría vivir Heidi con Niebla y el Abuelo. Típicamente suiza, El hotel no es muy grande pero est ahbitacion que nos dieron tiene hasta un baño enorme. El desayuno es en el restaurante de al lado. También hay una tienda de recuerdos en la planta baja.
Se trata de un hotel sobre la calle principal del pueblo, por cierto muy pintoresco, pero con acceso solo por escaleras. El desayuno, de tomarlo, es en el restaurante que se encuentra en la planta baja. Las instalaciones de la habitación fueron "excelentes" ya que nos asignaron la n° 1 que es al frente, en el 1° piso a la calle. Es toda de madera, muy amplia, con cabina de ducha y escosesa en el baño, el cual está integrado a la habitación. cama muy cómoda. La recomendamos 100%.
No es que hubiese estado incómoda, pero me parece mal que no te digan que no hay asensor y para gente de mas de 60 es muy engorroso subir las valijas por escaleras, ya que nadie te ayuda. La atención es pésima, lo único que les importa es cobrarte al entrar.
Creo que puede ser la habitación de hotel más chula en la que he estado nunca. Preciosa, romántica y con jacuzzi, qué más se puede pedir!! Muy bien climatizada. Con vistas a la plaza. Además te dan descuentos para restaurantes y para la visita a la fábrica de chocolate
Nos tocó la habitación fe la plade la superior. Tenía una cama grande y dos camas chicas, muy amplia. El baño tenia una bañera, era amplio y muy cómodo. Muy cálido lugar, nos gusto el amoblamiento y la limpieza. El desayuno tenéis que pagarlo allí (15 francos) pero está más que bien.
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