Por las fotos parecían buenas. Señe en Diciembre la Cabaña para pasar unos días en Tafi Del Valle en familia. Primera mala noticia: una semana antes de la fecha de entrada me llaman que debía quedarme un día menos por que se habían equivocado y ya lo tenían ocupado desde esa fecha, a lo cual debí ceder ya que para esa fecha no encontraba otro lugar. Llegados a la cabaña, el inodoro no funcionaba en forma correcta y la heladera no enfriaba. La respuesta de la dueña fue que deberíamos usar un balde y que la heladera no era tal sino que era un frigobar ( quizás yo debía saber que el frigobar no enfría ? Concepto que no conocía ) así que la mercadería debíamos dejar, el fiambre y las hamburguesas en un frizer en la administración. Las cabañas NO tienen cocina, solo un anafe, esto limita lo que puedes cocinar. Lo que nos enteramos en segundo día es que el servicio de desayuno no es todos los días sino día por medio ( estoy acostumbrado a viajar por Argentina y por el mundo pero esto no me pasó nunca ). Iba con la idea de disfrutar a pleno de Tafi y esta vez no se me dio. Lo bueno es su ubicación …
Realmente pintorescas y muy cómodas cabañas, buena cama, baño zonificado muy confortable, kitchenet completo y amplio comedor, asador y cochera. Juegos para niños. Todo rodeado de un hermoso paisaje. Pero... nada se compara con la excelente atención de su muy atenta y cordial dueña, Lorena. Totalmente recomendables!
Las cabañas muy cómodas, cerca de todo y fácil acceso. Lorena una genia!! siempre ayudando con lo que necesitábamos. Mono (el perro ja) también! fue un compañero mas en nuestra visita. saludos, agustín.
Hermoso complejo de cabañas atendida por sus dueños, son muy amables y muy atentos a cualquier faltante que puedas llegar a tener, es raro que falte algo porque las cabañas son muy completas y cómodas, muy recomendable descansar después de tan largo viaje allí, sin duda volvería!
Nos encantó la cabaña, el tamaño justo. Todas las comodidades. Fuimos en pareja, con tres niños y una border collie. La pasamos genial y su dueña nos hizo el fueguito para que estemos calentitos en un día muy frío. Hicimos malvaviscos en el fuego y miramos Harry Potter. Descansamos muy bien y a la mañana siguiente tomamos un baño muy caliente y reparador! Desayunamos con unas ricas medialunas y pancitos caseros , y seguimos viaje.Muchas gracias Lorena por tu cálida atención, hermosas tus cabañas!
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