¿Buscas donde alojarte en San Carlos de Bariloche? Entonces no te pierdas Rochester Hotel Bariloche, un hotel romántico que te acerca a lo mejor de San Carlos de Bariloche.
Se ofrece wifi gratuito a los huéspedes y las habitaciones de Rochester Hotel Bariloche incluyen cocinita y aire acondicionado.
Los huéspedes de Rochester Hotel Bariloche también disponen de piscina allí mismo. Para viajeros con coche hay parking gratis disponible.
Como está muy cerca de conocidos puntos de referencia, como Stupa de la Iluminacion (1,7 km) y Capilla de San Eduardo (2,1 km), los huéspedes de Rochester Hotel Bariloche pueden acceder con facilidad a algunas de las atracciones más conocidas de San Carlos de Bariloche.
Cuando estés en San Carlos de Bariloche, es posible que te apetezca probar gambas en algún restaurante cercano, como Butterfly.
Durante tu viaje, no te olvides de ir a ver parques populares, como Parque Nahuelito, Parque Municipal Llao Llao y Los Baqueanos.
Estamos seguros de que disfrutarás de tu estancia en Rochester Hotel Bariloche mientras descubres todo lo que San Carlos de Bariloche ofrece.
por la calidez y servicio del personal, encabezado por Soledad y Gabriel, como las habitaciones y el desayuno, es altamente recomendable el lugar. Esta muy bien hubicado a 5 min del centro y cerca de la desviacion al cerro
Podría resumirlo en que es muy lindo el loft pero incomodo en diversos aspectos: acceso a las instalaciones (pileta y gimnasio), ducha, y sin servicio de desayuno/restaurant. Creo que hay muchos otros hospedajes mas cómodos y hasta con mejor precio y servicios. Habitación: me hospedé en el loft. Visualmente es muy lindo, y tuve la suerte de tener una muy buena vista al lago (nro 22). Por lo que pude ver, no todos tienen la vista directa. Lamento que cometieron un error grave con el cortinado black out: uno siempre sabe que se filtra algo de luz, pero en este caso directamente le faltaba como 30cm de cortina. No cubría la totalidad del ventanal y complicaba mucho mi descanso. Me llama la atención que nadie se queja demasiado y para mi es algo clave. El hotel debe poder brindar un ambiente de descanso (les dejo una foto). El jacuzzi esta muy bueno pero la ducha es bastante incomoda: no tiene estante para apoyar tu propio shampoo o productos, perdía agua, y no había mucho espacio. Como detalle positivo: la heladera enfría muy bien. Algo atipico en hoteles. Desayuno: esta bien, pero todos los días es lo mismo. No incluye ni fruta, ni yogur. Se nota que los panificados no son frescos tampoco (los tienen freezados y cada día los descongelan). Además, recién se entregan a las 8.30/9.00hs por lo que si queres salir muy temprano, no hay forma que te lo entreguen. Al no tener restaurant, no podian ayudar con cosas basicas como que por ej, pedi un delivery, no me enviaron sal, y el hotel no puede ayudarte. Por ultimo, es verdad lo que dicen que se escucha mucho a las habitaciones contiguas. Pileta/gimnasio: el agua de la pileta siempre estuvo fría. Nunca pude meterme a pesar de estar ahí en diciembre. El acceso es terriblemente incómodo. Hay que bajar por un camino de ripio, y te viene todo el viento de frente del lago. El gimnasio solo consta de 3 cintas, no hay colchoneta ni pesas, ni nada. Esta todo compartido con la pileta así que suele estar húmedo y pesado.…
Me encantó el hotel y como se adoptaron a los protocolos covid. Los empleados maravillosos, ña limpieza un lujo, y las instalaciones increíbles. Una muy buena ubicación que hicieron mi estadía en Bariloche inolvidable. El desayuno ahora es llevado a la habitación: hermoso empezar el día así. Voy a volver
Primer impresión de este hermoso hotel... llegas con el auto y tenes que ir hasta atrás del hotel, nadie te recibe, arrastramos las valijas como pudimos (es totalmente incómodo) ya que es el camino de las cocheras con piedritas, no hay un camino para llevar valijas o caminar normalmente... las tenes que ir levantando y haciendo fuerza en vano ya que las habitaciones están atrás pero como nadie te recibe no te enterás de nada de esto de movida. Pusimos un pie en la recepción y ya nos dijeron que la habitación no iba a estar hasta el horario pactado, a veces pasa, a veces no pero la forma en la que nos lo dijeron no fue la mejor... porque puede pasar que no esté pero por lo menos te dicen vamos a hacer lo posible, acá fue un no rotundo desde el minuto 1. Ya ahí nos dimos cuenta que el hotel en sí no tiene conexión con las habitaciones, es decir, tenes que salir si o si al parque para ir a tu habitación. Me pareció rarísimo e incómodo ya que por ejemplo la pileta no la pudimos usar porque tenias que salir en malla y en bata y caminar por el jardín hasta llegar y no hacía calor claramente como para hacer eso y menos para volver mojado a tu habitación asique me parece inservible (más allá de que se la veía hermosa y tenía vista al lago, una de las razones por las que contratamos). La quisimos usar un dia y nos llamaron para decirnos que el agua estaba fría y además no podías usar los vestuarios por el covid asique era como no tenerla. Tampoco tienen restaurante. El desayuno te lo traen a la habitación (nada del otro mundo). La habitación está muy bien, impecable, amplia y linda pero es más como alquilar un departamento que estar hospedado en un hotel porque repito, no tiene conexión. Yo no lo recomiendo, no era la experiencia que esperaba. La zona es muy linda pero hay cientos de hoteles para elegir.…
Todo lo bueno que tiene el hotel, lo opaco el habernos cobrado de más el día que ingresamos. Reservamos por la página oficial y lo contratamos porque decía un precio en pesos. Nos llego un mail con un monto en dólares. Consultamos por WhatsApp cuál era el valor que teníamos que tomar. Dijeron los pesos. Cuando llegamos nos quisieron cobrar el IVA como algo extra (cuando hicimos la reserva no decía nada de un valor agregado). Nos dijeron que la diferencia era por la cotización del dólar cuando nosotros reservamos un jueves e ingresamos al hotel el miércoles siguiente (el dólar era el mismo ambos días). Después de varias quejas, nos dijeron que “paguemos la mitad de la diferencia y ellos asumían la otra mitad”. Lo terminamos aceptando porque recién iniciaban nuestras vacaciones y no queríamos quedaron sin alojamiento. Pero la verdad es que no correspondía abonar nada extra a lo que decía la página cuando reservamos (foto que tenía para demostrar). Claramente fue una estafa. Promocionan algo con un precio en la web diciendo “valor total” y después te quieren cobrar el IVA como extra, luego de reservar. Ojo a los extranjeros! Les conviene cambiar los dólares y pagar al dólar oficial porque sino es un abuso!! No estamos conforme con la manera de resolver la situación.…
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