Descubre por qué tantos viajeros ven Moana Surfrider, A Westin Resort & Spa, Waikiki Beach como el complejo turístico ideal cuando visitan Honolulu. Además de aportar la combinación ideal de calidad, comodidad y ubicación, ofrece un ambiente para familias con una amplia variedad de servicios diseñados para viajeros como tú.
Se ofrece internet gratuito a los huéspedes y las habitaciones de Moana Surfrider Westin incluyen televisor de pantalla plana, frigorífico y aire acondicionado.
Durante la estancia, disfruta de algunos de los servicios que ofrecen, como conserje y servicio de habitaciones. Los huéspedes de Moana Surfrider Westin también disponen de piscina y desayuno allí mismo. Para viajeros con coche hay aparcamiento disponible.
Como está cerca de la mayoría de los puntos de referencia de Honolulu, como Statue of Duke Kahanamoku (0,3 km) y Saint Augustine by-the-Sea (0,5 km), Honolulu Westin es un fantástico destino para turistas.
Mientras estés en Honolulu no dejes de probar demandados platos de cangrejo en House Without a Key, Alan Wong's Restaurant o Hula Grill Waikiki.
Si tienes tiempo, Hale Koa: Iolani Barracks es un castillo al que es relativamente fácil llegar.
Estamos seguros de que disfrutarás de tu estancia en Moana Surfrider, A Westin Resort & Spa, Waikiki Beach mientras descubres todo lo que Honolulu tiene para ofrecer.
El mas antiguo. Conserva todo su glamour. Hermoso bar y espectacular restaurant. Musica hawaiana en vivo. Queda sobre la calle principal llena de negocios lujosos. La playa no es linda pero al ser privada no esta tan congestionada.
La ubicación es genial, todo el centro esta a pocos paso del Moana Surfrider, lo que si todo lo que respiras lo tienes que pagar, levantarte temprano para conseguir una reposera, no te dan ni una hora extra en el check out, recomiendo las habitaciones con balcón y vista al mar! fue única y espectacular. La bienvenida fue increíble de película!!! Lo que se destaca es la historia, su arquitectura, no es muy lujoso, pero precioso!
Es verdad que no es un hotel de lujo, pero su arquitectura, su historia, así como su localización lo hacen único. Aunque al llegar de noche la habitación me pareció pequeña y triste, fue una auténtica sorpresa despertarme con el ruido del mar, las fantásticas vistas de Waikiki beach y sentirme formar parte de un edificio histórico. Disfruté mucho de la playa, sobretodo a primera hora de la mañana, de los desayunos en el restaurante con vista al mar, de su decoración, del trasiego de personas en el hall, de sus puertas abiertas, de la amabilidad del personal,...
Estuvimos 3 noches en el hotel y nos encantó. Aunque estuvimos alojados en la parte antigua del edificio y es cierto como leí en otros comentarios que las habitaciones eran muy muy pequeñas. El restaurante espectacular merece la pena coger el menú degustación sobre todo cuando va acompañado de la música en directo. Nos indicaron como reservar el shuttle para ir al aeropuerto, pero a la ida pensábamos que había uno del hotel esperando en el aeropuerto pero no era así, fallo nuestro que no vimos que había reservar previamente. 100% recomendable
ubicacion excelente, glamour de ser considerado "la primera dama de hawaii". la entrada principal es muy bonita y siempre hay limosinas con parejas de novios que llegan a casarse al hotel .- la parte mala son las habitaciones ( al menos la de este sector ) , son muy pequeñas ( lo habia leido y lo ratifico ), las alfombras viejas, el baño es limitado y sin bañera, tiene muy poco mobiliario para guardar la ropa. OJO dije limitado no es malo. si priorizas la ubicacion este es el lugar indicado. si priorizas la comodidad de las habitaciones este no es tu hotel.
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