Es un lugar que lo único bueno es la ubicación. Pero después el trato del dueño que es violento hace que se cree un clima desagradable. Sumado a que habia olor a gas ( bastante peligroso) se molesto y contesto agresivamente el dueño cuando se lo hice notar. Ademas el horario del desayuno supuestamente es de 730 a 1030, nunca estuvo 730 listo y es escaso ademas que tortas quemadas o viejas. En teoria la cocina se puede utilizar hasta las 23 cosa q algunos dias de mi estadia no se respeto cerrandola a las 21. Me tiró el arroz que habia hecho y dejado en la heladera comunitaria que x cierto anda mal. Como podran apreciar el cartel con falta de ortografía estaba pegado en una de las paredes
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