Veníamos recomendados a este hotel, y la verdad es que nos quedó una sensación agridulce.
Íbamos 2 parejas de luna de miel. Cosa que dejamos claro al contratar el hotel desde España así como que queríamos unas habitaciones con vistas al mar.
Al llegar al hotel, nos encontramos con la sorpresa de que nuestra habitación daba a una calle detrás del hotel con lo que de vistas al mar nada. La de nuestros amigos sí que daba al mar, pero era un bajo y había un olor permanente a humedad muy fuerte y desagradable.
Hablamos con la responsable de recepción y nos dijo que no podían hacer nada, que por el momento no habían más habitaciones, así que nos quedamos con las vistas traseras y el mal olor.
Al día siguiente, mientras nuestros amigos descansaban por la tarde, dos personas de mantenimiento entraron en la habitación sin llamar a la puerta ni avisar diciendo que venían a mirar los filtros del aire acondicionado.
Al comentar este hecho en recepción le quitaron importancia. Igualmente, el olor seguía ahí…
Al tercer día nos dicen que han conseguido dos habitaciones mejores y que no nos preocupemos por nada que ellos nos cambian todo de sitio mientras estábamos de excursión.
Cual fue nuestra sorpresa al ver que las nuevas y mejores habitaciones, eran dos plantas bajas en el lado más alejado del hotel, mucho más pequeñas y también con mal olor.
Pedimos de nuevo...Veníamos recomendados a este hotel, y la verdad es que nos quedó una sensación agridulce.
Íbamos 2 parejas de luna de miel. Cosa que dejamos claro al contratar el hotel desde España así como que queríamos unas habitaciones con vistas al mar.
Al llegar al hotel, nos encontramos con la sorpresa de que nuestra habitación daba a una calle detrás del hotel con lo que de vistas al mar nada. La de nuestros amigos sí que daba al mar, pero era un bajo y había un olor permanente a humedad muy fuerte y desagradable.
Hablamos con la responsable de recepción y nos dijo que no podían hacer nada, que por el momento no habían más habitaciones, así que nos quedamos con las vistas traseras y el mal olor.
Al día siguiente, mientras nuestros amigos descansaban por la tarde, dos personas de mantenimiento entraron en la habitación sin llamar a la puerta ni avisar diciendo que venían a mirar los filtros del aire acondicionado.
Al comentar este hecho en recepción le quitaron importancia. Igualmente, el olor seguía ahí…
Al tercer día nos dicen que han conseguido dos habitaciones mejores y que no nos preocupemos por nada que ellos nos cambian todo de sitio mientras estábamos de excursión.
Cual fue nuestra sorpresa al ver que las nuevas y mejores habitaciones, eran dos plantas bajas en el lado más alejado del hotel, mucho más pequeñas y también con mal olor.
Pedimos de nuevo el cambio a las antiguas habitaciones, y de nuevo otra vez a trasladar todo.
Esa misma noche, cuando volvíamos de cenar intentamos entrar en la habitación pero la tarjeta no abría la puerta. Llamamos a recepción y a los 10 min aparecieron dos chicos de mantenimiento.
Después de 1 hora sin conseguir abrir la puerta, deciden llamar a un tercero, que aparece con una escalera…. Deciden entrar por el balcón rompiendo la ventana. El problema es que desde dentro tampoco podían abrir.
Al final, tras más de dos horas sentados en el rellano de la entrada, consiguen abrir la puerta, pero nadie nos dio ninguna explicación ni nos pidieron disculpas.
Al día siguiente al comentarlo en recepción de nuevo, quisieron quitarle importancia al asunto.
El 5º día cambiaron la habitación a nuestros amigos por una en la 2 planta que no tenía problemas de humedad.
El bufete era muy sencillo, al 3º día era complicado no repetir la comida ya que no había mucha variedad.
Hay un restaurante italiano que se supone que era de mejor calidad y a la carta, pero la verdad, es que no tenía mejor calidad, ni la pasta ni las pizzas eras nada del otro mundo.
El servicio de los camareros correcto, no eran muy simpáticos pero hacían su trabajo.
El bar de cócteles era muy muy lento, tardaban más de 20 min en servirte un cóctel dentro del horario “all inclusive” no sé si a propósito o no…
El servicio de animación también me parecieron un poco pobre, nunca te enterabas de las actividades que se hacían ni eran muy proactivos para animarte a participar.
Había wifi en el hotel, pero se desconectaba siempre y daba problemas.
La verdad es que diría que el hotel era correcto, sin más, pero no lo recomendaría a un amigo.
Para ser nuestra luna de miel, en ningún momento tuvimos la sensación de estar en un hotel especial, con un trato especial etc….Más
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