Hermoso lugar. Todas las comodidades en medio de la selva. Los paseos por senderos te permiten ver selva virgen. Increíble los inmensos helechos arborescentes! Te remontan a la era jurásica! Increíble todo.
- Estacionamiento gratis
- Restaurante
Hermoso lugar. Todas las comodidades en medio de la selva. Los paseos por senderos te permiten ver selva virgen. Increíble los inmensos helechos arborescentes! Te remontan a la era jurásica! Increíble todo.
Un hotel hermoso, con habitaciones amplias y comodas. rodeado de selva virgen a orillas de un arroyo, esto si es un lugar para estar en pleno contacto con la naturaleza. con circuitos por la selva para explorar. ideal para ir en pareja y desconectarse del mundo. altamente recomendable!
Estuvimos 3 días en Don Enrique junto a mi esposo y nuestras dos hijas (7 y 4) en el mes de septiembre. Llegamos en auto hasta colonia La Flor, (donde lo dejamos seguro en casa de un lugareño) y Daniel, dueño del lugar, nos recogió con su camioneta. Su atención y la de su esposa Nechi, así como del personal en general es excelente. Las cabañas son un lujo! Están bien separadas entre sí, son hermosas, cálidas, amplias, cómodas, limpias y súper bien decoradas. Tienen un deck propio sobre el arroyo frente a la Reserva de Biósfera Yabotí con reposeras donde podría pasar una vida simplemente admirando la belleza del lugar. La cabaña principal tiene un living divino y un comedor con vista donde se sirven las comidas (caseras y muy ricas) a todos los huéspedes juntos. Allí mismo a veces captas alguna señal de internet solo para las comunicaciones básicas pero nosotros nos resultó bien así, porque sin el uso del celular estableces más conexión con el lugar. Hacíamos caminatas por los senderos de la reserva por la mañana y por la tarde. Se deciden los circuitos entre los huéspedes y Eliseo, el guía, muy amable y experimentado. El adecua las excursiones a nuestras posibilidades.
El hecho de compartir momentos con otros huéspedes genera un clima de intercambio y familiaridad muy agradable. Cuando el clima acompaña, se pueden dar baños y dejarse llevar por la suave corriente del arroyo que es poco profundo y seguro (en septiembre aún estaba un poco fresco) Tiene una zona de juegos o "placita" para los chicos con hamacas, toboganes, una casita del árbol y una tirolesa de los que disfrutan como locos. Destaco que para sorpresa nuestra casi no hubo mosquitos, cosa que suele ser una preocupación entre las madres de niños pequeños. Y el terreno es seguro, sin grandes desniveles o pasarelas peligrosas para ellos. Fue una experiencia inolvidable, esperamos volver pronto. MUCHAS GRACIAS POR TODO!!
El lugar está muy bien cuidado y se siente la atención de sus dueños en cada detalle.
La comida es muy rica pero deberían ofrecer algunas posibilidades alternativas, sin necesidad de complejizar, por ejemplo opciones de frutas para el postre.
Sugerimos también agregar la opción de bebidas de litro para no generar tanto basura no reciclable.
Lo mejor es la posibilidad de desconectarse, al ser un lugar en el que no llega la señal del celular.
Lugar mágico, cabañas de madera muy cálidas, buena comida, mejor atención. Solo cruzar el arroyo y penetrar en la espesura recorriendo los senderos de la Reserva de biosfera Yaboti Con los guías muy baqueanos y conocedores del lugar.
Muy recomendable
Don Enrique Lodge es uno de esos lugares diferentes y únicos que no pueden dejar de conocerse. La atención de Daniel y su mujer excepcional. Se trata de un conjunto de 5 Cabañas y un pequeño house en el que está el comedor donde se cena, en una mesa larga donde se pueden compartir charlas con otros turistas incluso de otros países. La pensión completa excelente y muy abundante. Lo que corre por cuenta del pasajero es el té de la tarde que se sirve en la mesa de la galería.
Las cabañas están aisladas unas de otras y tienen una privacidad absoluta. Cuantas con un baño, un dormitorio y un living. 5 personas entran sin dificultad. Cuantas con dos decís y muelle propio sobre el arroyo. Realmente precioso. La energía eléctrica es muy mala por lo que los ventiladores funcionan despacio. No existe señal de celular y no hay TV ni aire acondicionado. Esta realmente en medio de la selva. Recomiendo contratar a Daniel para que los busquen y no tener que llegar hasta allí ya que el camino está muy deteriorado.
Pueden hacer dos trecking por día (uno a la mañana y otro a la tarde) con guias nativos (incluido en la tarifa). Se los recomiendo, verán lugares de una belleza inimaginable, incluyendo saltos de agua donde podrán mojarse. Lleven mucho repelente de insectos!!,
No se lo pierdan, vale la pena para desenchufarse y entrar en contacto con la naturaleza. No es para quienes solo quieren grandes hoteles 5 estrellas con todas las comodidades. Tengan en cuenta que suele ser muy caluroso y la humedad es muy elevada.