Siempre que vengo a bariloche me reservo un dia para ir a comer al lodge del maiten porque es exquisito. Sin ser pretencioso tiene una calidad de servicio y comida tipica patagónica que no tiene nada que envidiarle a los mejores restaurants de la guía michelin. Esta vez vinimos para navidad y sorprendí a mis amigos con esta joya escondida en el maiten. Mi preferido: la trucha con salsa de hongos!

Si bien la atención es muy buena y el lugar es sumamente cálido, no disfruté mucho de la comida. La bebida (vinos y cervezas) es muy buena.

Lo bueno: buena atención, el lugar es hermoso, buenas vistas, excelente salon comedor, buenos baños
Para mejorar: pedimos trucha con papas al natural (las papas estaban congeladas adentro, ) No nos pareció que tuvieran experiencia en cocina. Se nos ofreción una mousse casera..no lo parecía. No había relación entre precio y calidad: deseo aclarar que fuimos fuera de temporada.

fuera de temporada, quizás la unica opcion. el lugar es todo de madera y piedra, muy elgante y bien calefaccionado. la comida era de platos típicos, no super-abundantes pero todo rico. atencion muy buena.