Es una casa entrañable, hogareña,acogedora y con una situación ideal para poder ir de forma facil a sitios maravillosos.
Estuvimos en Octubre mis peludines (perritos ) y yo. No vemos el momento de poder ir de nuevo a disfrutar de esta casa, patio,azotea y entorno qué no pudimos ver todo lo qué ofreciera gracias a las recomendaciones de Teresa por eso volveremos
Una casita encantadora, limpia, acogedora, excelentemente decorada, donde te sentirás como en casa. Si quieres tranquilidad es un sitio estupendo....si no la quieres el momento de ir es en las fiestas del pueblo....no tendrás ni un momento sin música. La ubicación de la casa con respecto a sus preciosas calas es ideal.....no estás en el bullicio que imagino hay en julio o agosto...ya que yo fui en septiembre y había mucha tranquilidad....solo el mar, arena o piedra y yo! Por cierto Teresa, la propietaria muy atenta...me aconsejó lugares para visitar. Todo genial.