Es un hotel magnifico, muy grande, pero muy bien cuidado. Las habitaciones son muy espaciosas, limpias y están bien decoradas. El servicio es excelente y la comida deliciosa. La playa es de agua cristalina y ofrecen tablas de SUP y otros materiales para practicar deportes de agua (incuidos en el precio). Tienen también servicios de buceo (no incluido) en el mismo hotel y te gestionan tus viajes para bucear.
Nosotros disfrutamos mucho de la estancia, pero hay que tener en cuenta que, además de ser un hotel muy grande (muchos huéspedes), también es un hotel familiar al que van muchas familias norteamericanas durante sus vacaciones (por lo que hay muchos niños y, a veces, demasiado ruido).