Primera vez que visitamos Hutaulco y no pudimos escoger mejor opción. El personal es de lo mejor, siempre amables y dispuestos a ayudar, incluyendo los barmans (aunque ud no lo crea). Las instalaciones modernas, cuartos cómodos y buenos restaurants con alimentos de buena calidad, a diferencia de muchos todo incluido de Cancún donde los alimentos dejan mucho que desear y con suerte consigues una buena atención en los bares si no eres extranjero o traes los dlls en la mano.
El hotel esta en la Bahía Conejos y es lo único que hay ahí, es como si tuviera su playa privada. En una de las orillas hay unas carpas que rentan para el público en general, pero es muy pequeña el área.
Pros:
No te ponen brazalete
No necesitas tarjeta para las toallas
No ocupas reservación para los restaurants
No niños
Instalaciones
Tips:
Los edificios de habitaciones tienen 3 pisos, las habitaciones que tienen jacuzzi en la terraza estan en el primer piso, y si te dan en el primer edificio vas a tener solo vista parcial al mar. Nosotros solo la usamos una vez y preferimos usar la tina del baño que es mas grande. El edificio que esta frente a las albercas (y mar) tienen el concepto de "alberca" en la terraza, pero no se ve el mar, así que si quieres vista completa al mar apenas el 3r y 2ndo piso del cualquiera de los edificios.
Los restaurants que abren en la noche tienen su disque código de vestimenta, solo que es a criterio de la hostess, por ejemplo si es casual-elegante y traes una camisa y bermudas de vestir no puedes entrar, pero puedes comer afuera, pero si alguien va con una bata transparentosa intentando simular un vestido, ahí si puede entrar.
Cuando hay pocos huéspedes cambian la modalidad de bufete a "a la carta", y no abren todo los restaurants en las noches. En el oriental puedes reservar para tener la experiencia del teppanyaki (plancha), te recomiendo hacerlo cuando llegues porque hay pocos lugares y son muy solicitados.
La señal celular no es muy buena, tienen internet gratis, pero solo te permiten 3 dispositivos por habitación y no pudimos descargar nada Netflix para el regreso.
Al parecer con la pandemia solo abren 2 restaurants por turno, esto ocasiona filas de 10-15mins cuando hay muchos huéspedes.
OJO: Nosotros reservamos todo por medio de su página web, incluyendo los vuelos. Escogimos los de ida para llegar temprano y los de regreso para llegar tarde. Al parecer esto no le pareció a Aeromexico, ya que nos los cambio todos a su antojo y nos hizo perder gran parte del día de llegada y todo el de regreso sin opción a cambios porque la página te vende la tarfia más barato (básica) con la cual no puedes hacer ningún cambio, no importa que tengas que pasar 8 hrs en el aeropuerto de CDMX.
Trampas de turistas:
- En la playa nos ofrecieron un paseo a las bahías en 3mil pesos por pareja, el mismo paseo lo encuentras en 600 pesos por pareja en el pueblo.
- Después del check-in nos ofrecieron un regalo por atender una platica en donde nos iban a dar información del hotel y sus filiales. Aceptamos el regalo aún sabiendo a lo que íbamos y efectivamente era una sesión para vendernos una membresía al estilo de los otrora tiempos compartidos. Si atiendes la sesión vas a perder 2.5 hrs por lo menos. La membresía se veía atractiva pero pudimos resistirnos de comprarla.
Sugerencias para el hotel:
- Faltan unos baños más cerca de la playa, y sin tienen donde hacerlos (lado izquierdo de la rampa).
- Falta un bar más cerca de la playa.
- Incluyan comida Oaxaqueña en sus menús, aunque sean tlayudas y quesillo.