En general las instalaciones del hotel y servicios nos parecieron adecuados respecto a la tarifa. La mayoría de los miembros del equipo atentos y enfocados al servicio, sin embargo, las personas que estaban en servicio en la recepción (frontdesk) el Sábado 16 de Noviembre al rededor de las 3pm, nos brindaron el peor servicio que pudieron, groseros, sarcásticos y poco cooperativos, principalmente el joven de lentes, quien le contestó a mi padre que el costo de las habitaciones variaba diariamente por el efecto de la oferta y demanda en un tono bastante sarcástico y burlón, además de altanero y sin vocación de servicio, definitivamente los únicos del equipo que mostraron esta actitud pero que amargaron la experiencia por completo.