El Resort esta situado en una punta de la isla, totalmente aislado, s quieres salir para conocer la isla o alquilas un coche o te arruinas con los precios de los taxis. En la recepción son antipáticos, no se desviven por el cliente, no tienen nada que ver con la amabilidad del Caribe Latino.
Solo entrar te indican en unas fotocopias, que solo tienen en ingles e italiano, que las normas: no hay todo incluido porque las bebidas en lata y embotelladas se tienen que pagar, no hay nada en la nevera de la habitación, los restaurantes (solo 2) no estan abiertos las 24 horas, cierran y por la tarde si tienes hmbre te aguantas..
La comida puede ser en los bares de la playa a base de hamburguesas, hot dogs y pollo bbq, o en el Rainbow de la entrada, la comida es pésima, te traen la bebida tarde, la calidad del ersonal es infima, es totalmente decepcionante, te deprimes al primer minuto.
El Director, es un hombre sin caracter que te da la razon en todo cuando te quejas y lo unico que te dice, que su all inclusive no es el habitual que ellos tratan mas de estar en contacto con la naturaleza.. en resumen: patetico!
Hay dos playas llenas de lagas y medusas, pero es lo unico decente que tiene el hotel.çLos precios son abusivos, solo hay wifi gratis en la zona de la recepcion que s epierde con facilidad, tienen una especie de casucha donde te cobran 3 euros por cada 15 minutos.
Si quieres cenar en el rest italiano que tienen se ha de pagar 35 dolares americanos.
El Spa es de risa, mejor ni ir...
Las toallas para la playa te las dan a partir de las 10 de la mañana, antes no tendras, y si preguntas a la chica "super antipatica" de la piscina, te contesta que no tiene ni idea de cuando estaran.. como si no fuera su trabajo. son super secos y amargados, excepto el chico de la playa que va con un carro cn bebidas asquerosas, los demas todos super antipaticos.
En resumen: NO VAYAIS!!!! es deprimente!!!!