Estuvimos dos dias en este hotel y nos encantó. Volverémos sin duda.La habitación con todas las facilidades y el desyuno altamente recomendable todo buenísimo y de calidad.
Quiero decir que el restaurante para el desayuno no encontramos a tres maravillosas personas, un señor que no paraba de trabajar y otra señora encatadora que iba siempre acompañada de Magg. La señora Magg es el alma del hotel con su hospitalidad irlandesa, siempre tiene una palabra amable para todos y hacerte sentir bien. Gracias