Lo primero que vi cuando entre por la puerta del hotel fue un cenicero papelera lleno de basura (que me dio muy mala impresion ) pero la decoracion es bonita , con salas para tomar algo, los empleados son amables y el hotel es tranquilo. La habitacion un poco justa y sin ningun detalle como complementos de baño. La limpieza de la habitacion es poco rigurosa, no por culpa de las chicas, seguramente deben tener una empresa de estas que van corriendo y a un precio bajo. Senzillamente no te hacen la habitacion sino lo pides expresamente y en el papel ponen en retulador verde que la havitacion esta revisada pero no siempre es verdad. Lo peor fue el desayuno. Los comentarios que dicen que el desayuno es bueno, lo siento, pero no dicen la verdad. El zumo no era natural, no havia ni una simple tostadora i en el bol de la fruta havia peras, manzanas i limones. Y lo demas no valia gran cosa. El primer dia me queje y durante dos dias pusieron una piña, claro nunca llegava a comer la piña, porque solo havia una. El tercer dia le pedi alguna fruta diferente al encargado i se hicieron los despistados, me miravan, entravan y salian, pero nada. Al final me fui. Supongo que el encargado lo debia pasar mal, debe tener un presupuesto ajustado y no puede ofrecer fruta cortada ni nada. Esa es la verdad del botel. Tienen una piscina muy mona, a 9€ por hora que es la foto que ponen de reclamo, pero en realidad es un hotel de 3 estrellas y con un desayuno igual de pobre. Es la primera vez que me ha pasado. Me siento como si hubiese tirado el dinero porque fui a este hotel con toda la ilusion. Si que es verdad que la directora nos ofrecio para compensarnos por los problemas que tuvimos con la habitacion una entrada gratuita a la piscina, no lo cogimos no por despreciar este amable gesto sino porque he oido que hay viajeros que se quejan en hoteles y restaurantes de cualquier cosa expresamente para obtener algun servicio gratuido o que les devuelvan el dinero, y este no es mi caso. No por nada mas la verdad. Yo no volvere nunca mas al tulipe golden, pero a Estrasbourg seguro que si, me encanta la cultura y la lengua francesa y es una ciudad pequeña pero preciosa. Lo siento por ser tan directa en mi comentario, pero lo mejor es decir la verdad pada poder mejorar. Mejoren el desayuno porque cuando no comes bien al cliente todo le parece peor. Animos.

El hotel NO es un 4 estrellas ni de lejos. No atienden a las peticiones de los clientes, como disponer de camas individuales. Nos dieron el primer dia una habitación ya ocupada, por poco no me tacharon las ocupantes de un intruso violador...., poco le faltó. Tuvimos que hacer nosotros mismos la habitación el 3r. dia, el pasotismo del personal es patético. Las habitaciones son muchísimo más pequeñas que la que presentan en las fotos, el mini bar con 2 botellas de agua (hotel de 4 estrellas...), las vistas perfectas para un suicidio. El desayuno merece un comentario a parte porque es un engaño monumental, ni fruta (salvo 3 manzanas agrias), ni pain grillé... vaya ... un engaño de guante blanco. No lo recomendamos en absoluto. Una verdadera lástima porque la cadena TULIP gozaba de un prestigio para nosotros que ha resultado ser un perfecto fiasco. La limpieza deja mucho que desear, solo ver las terrazas individuales y las comunitarias. Las mesas y ceniceros sin vaciar ni limpiar a partir de las 23h., hasta las 12 del mediodía. Una mala experiencia con el servicio y lo que el hotel oferta. No deja de sorprendernos, Cómo la prestigiosa cadena TULIP puede permitirse semejante servicio y mal trato a los clientes que con buena fe escogimos este hotel....? Nuestro sentimiento es de profunda decepción y nos sentimos engañados. Hemos aprendido algo a nuestros 60 años... Nunca pagar por adelantado, contratar solo por un dia y luego ya se verá... Realmente muy enfadados y sabemos que no es algo personal. La incompetencia está por todas partes , en el Golden Tulip de Strasbourg se concentra mucha incompetencia en muchos aspectos de la gestión del hotel. No nos volverá a ocurrir.... Añadir que estamos acostumbrados a viajar e ir a hoteles (unos 30 al año), nos gusta pasar desapercibidos y anónimos...., nunca conocí situación semejante. Nuestra indignación queda con nosotros.