Es la segunda vez que voy este año.

Restaurante ubicado en los Montes de Málaga, al inicio y fin de caminos donde poder pasear tranquilamente, en mitad de la naturaleza.

A destacar la comodidad para aparcar y la facilidad de hacer reservas, teniendo en cuenta que los domingos es el mayor día de las mismas.

Respecto a la zona exterior, la terraza es genial para almorzar ya que al ir con niños pequeños pueden disfrutar del parque infantil que tiene y así tener un almuerzo plácido las familias.

Del servicio de camareros decir que son muy atentos y están muy bien organizados.

También comentar que la comida es la normal de la zona, aquella que se proporciona en los Montes: migas, arroz, chorizo, morcilla, carnes a la brasa o plancha...bien servida y presentada. Como postres el arroz con leche y la tarta de queso muy normales.

Con relación a las medidas COVID 19, ofrecen distancia de seguridad entre mesas y gel hidroalcohólico.

La asistencia ha sido de 4 adultos, 2 niños y 1 bebé en carrito. Adjunto cuenta en imagen.

Por otro lado, hemos echado de menos algún detalle como es típico en Málaga: chupito, postre o provolones; también sería conveniente que los aseos fueran limpiados frecuentemente ya que estaban sucios en las 3 ocasiones que he ido.

Sin lugar a dudas, lo recomiendo y repetiré visita.

Enclave precioso, bastante espacio para aparcar (aunque en fin de semana termina quedándose justo), seguridad antiCovid, servicio de camareros tan atento como amable, y comida excelente: el mejor lomo en manteca que hemos probado, croquetas de lomo originales y buenas, migas espectaculares, y postres caseros para chuparse los dedos, por muy lleno que uno llegue...Precio normal...Muy recomendable en general. Enhorabuena al equipo en general.

Hoy he ido junto a mi familia a almorzar, impresionante, amabilidad, cercanía, la comida exquisita , el trato de 10, limpieza ejemplar en los baños , sin duda repetiremos!!!

Es una de las primeras ventas saliendo de Málaga por la carretera de los Montes. El aspecto exterior es similar al resto de las ventas, pero el comedor es moderno y está decorado como un restaurante, con una amplia vista hacia la parte trasera. Tiene aparcamiento propio. La carta es variada, pero de platos típicos de Málaga y de los Montes. La tención del personal es buena y servicial. La comida está muy buena. Tanto las carnes, como el plato de los montes o el plato a lo bestia muy sabrosos y muy logrados. El precio moderado.

Fuimos dos parejas a comer,y todo espectacular!el plato bestia parece pequeño pero es perfecto,las croquetas de lomo...impresionantes! Un Ali olí de riquísimo.
He de destacar la atención del camarero Anthony,muy amable,simpatico,todo lo que se espera de un gran camarero...ojalá más como el...