Personalmente, adoro los áticos, pero es que además este es un loft con todo lo necesario para pasar unos días disfrutando de Toledo de la manera más idílica. Su propietaria es súper amable y detallista: nos dejó un vino, comida para desayunar al día siguiente y unas recomendaciones detalladas para poder disfrutar al máximo de nuestra estancia en la ciudad. El apartamento es súper cómodo, decorado de manera minimalista y con mucho gusto. Además, está totalmente reformado y también dispone de aire acondicionado para aplacar el calor que sentimos este fin de semana. Totalmente recomendable.