Hotel precioso y acogedor. Habitación muy grande y decorada con mucho gusto. Muy buenos materiales y acabados. La ventana daba directamente a un canal.
La cama era comodísima y hay carta de almohadas si lo necesitas. Tiene smart tv y buen wifi.
Baño de mármol, muy bonito y amplio con bañera y amenities.
En general, todo estaba limpísimo.
Las areas comunes muy bonitas, tiene bar salón y restaurante. El desayuno es lo mejor, todo muy muy rico.
Está súper bien ubicado sobre un canal pegado a San Marco, a 2 min de la plaza andando, con muchas tiendas y restaurantes por la zona.
Repetiré sin ninguna duda al volver a Venezia. Lo recomiendo totalmente.