Un hotel que nos remonta al siglo XIX donde uno pareciera compartir con ilustres visitantes de otros tiempos. El servicio excepcional e imagino que en el verano con el cercano balneario se convierte en una opción imperdible

Gran hotel decadente y muy agradable con buenas habitaciones amplias y en buen estado de conservación. Bien localizado, si el precio es bueno es una muy buena opción. En el lado menos bueno, Desayuno solo aceptable, una maquina multiple d cafe en este sitio no pega, poca fruta. El restaurante tiene buena calidad y no es caro pero las raciones no son pequeñas sino ridiculas, buen sitio si esta a dieta, por ejemplo el carre de cordero son 2 costillas d lechal

Mi marido y yo hemos pasado recientemente dos días en este hotel y nos ha gustado todo muchísimo. El hotel es precioso. Nuestra habitación, en el segundo piso, era bonita y especialmente tenía una gran vista; desde el balcón se veían los jardines de hotel, la Latomia dei Cappuccini y al fondo el mar. El comedor es espectacular, las dos noches cenamos en el restaurante del hotel. la cena estuvo bien y con muy buena relación calidad-precio.
El hotel esta un poco retirado del centro pero nosotros fuimos andando a Ortigia y a todos los sitios. Además tiene un aparcamiento muy bueno y nunca hay problemas para dejar el coche.
El servicio en el restaurante, en recepción y en todas partes es amabilísimo y me gustaría agradecer a todos los dos días tan buenos que pasamos en el hotel.