El hotel está muy bien. Es un edificio antiguo al que le han hecho una reforma. Estuvimos alojados 3 noches y su ubicación nos pareció perfecta pues nos permitió descubrir Ortigia a pie. En coche está a unos 35min de Noto y a unos 40min de Marzamemi. Está ubicado en el lungomare de Ortigia.
Hay habitaciones con vistas al mar muy agradables, pero no todas. Las que no tienen vistas al mar miran a un callejón o a las azoteas y son menos bonitas, pero igualmente es un alojamiento muy correcto, con un desayuno muy rico y perfecto si se busca un alojamiento no lujoso pero adecuado. Además, cuenta con una terraza en la azotea muy bonita, con un restaurante vegetariano que nos quedó pendiente probar. El personal es muy agradable y servicial. Tuvimos un problema y al día siguiente nos cambiaron una de las habitaciones.
Estuvimos, en resumen, muy a gusto.