Pasamos 3 noches en el hotel, las habitaciones son confortables, cama blanda y cuando te acostumbras cómoda. Se puede regular la temperatura en la habitación. Las vistas a la iglesia preciosas i habitaciones nada ruidosas, estuvimos en la planta 4. El buffet de desayuno muy completo (dulce y salado).
Como negativo apuntaría que para ser un hotel de 4 estrellas y por el precio, tienen pocos detalles en el lavabo (solo jabón de manos y gel incrustados en la pared). También le hecho de que en la descripción de la habitación incluían albornoz y zapatillas y no estaban. Pedí las zapatillas y las trajeron.
El aparcamiento difícil, pero te indican una zona de la ciudad donde se puede aparcar gratis teniendo cuidado de las zonas residente.