Personal desastrosos,maleducados y no intentan entenderte.Pasan de los clientes y ni se molestan en ayudarte ni hacerse entender.Las habitaciones huelen mal,no ventilan las habitaciones y las sábanas muy viejas
- Playa
- Restaurante
Personal desastrosos,maleducados y no intentan entenderte.Pasan de los clientes y ni se molestan en ayudarte ni hacerse entender.Las habitaciones huelen mal,no ventilan las habitaciones y las sábanas muy viejas
Es un hotel que no merece ni las estrellas que tiene ni la denominación "Boutique". Las habitaciones están sucias, con olor a tabaco y tanto la cama con la habitación en sí es incómoda. El baño es pequeño y sin apenas luz. El servicio es pésimo, tan solo hay dos recepcionistas que no saben hablar nada más que Portugués y además son maleducadas e irrespetuosas con los clientes. El desayuno es escaso y ni siquiera hay una tostadora para el pan. Para colmo obligan a cobrar por adelantado cosa que se considera ilegal.
Trato amable, muy buenas vistas lugar tranquilo cerca del centro y la playa. La habitación muy linda pero algo reducida. muy buen desayuno. muy difícil para estacionar en el hotel aún con vehículos pequeños
Estuvimos 10 días alojados en este hotel. Es muy céntrico pero a su vez alejado del bullicio. Todo el personal es muy amable. Las habitaciones muy correctas, la cama muy cómoda. La piscina muy agradable y una buena wifi. Sólo comentar que deberían poner más canales de televisión, alguno en español. También que la caja fuerte es muy rudimentaria. Las toallas que te prestan para la playa deberían ser algo mejor, pues parecen las que se hayan olvidado los huéspedes, de cutres y todas diferentes y sólo puedes cambiarlas cada 3 días. La puerta del baño, al menos de nuestra habitación, debería ser corredera o no te puedes mover ni entrar. La luz del baño era muy floja y te veías muy poco, por suerte se fundió y al cambiarla se vio algo más. Las habitaciones muy limpias pero comentar que hubo dos días que no estuvo hecha hasta pasadas las 16h., habiéndonos ido a las 10h. de la mañana. Comentar también que la neverita enfría muy poquito.En cuanto al desayuno deberían mejorar un poco en cuanto al pan y toda la calidad de las cosas en general y variar un poquito, pues los días días hubo exactamente lo mismo, y era poca variedad, la verdad. El pan, todos eran de molde del tipo embolsado, y algún día estaban un poco secos. Si querías tostar el pan debías dárselo a ellos, y eso es un tema muy a gusto de cada uno. Comentar también que deberían mejorar el acceso al parquing y la puerta de entrada. En resumen, para ser un tres estrellas, muy correcto.
El hotel se encuentra bien ubicado. En el centro histórico de Albufeira pero lo suficientemente alejado del bullicio.
Una buena playa a 5 minutos a la que acceder por ascensor o escaleras.
La limpieza correcta salvo que un hotel de 30 habitaciones no debería estar limpiando hasta las 16:30 y que los huespedes no puedan descansar despues de comer.
Gel y crema hidratantes rellenados o usados por el anterior huesped y no los han respuesto en toda la estancia.
30 Habitaciones y 11 tumbonas.. las cuales a las 8 d e la mañana estan reservadas. Deberian vigilar mucho esto.
Desayuno.... pobre, zumos intragables. No hay tostador al servicio del huesped. Ponen tostadas y si tienes suerte te tocara recien hecha.
No repetiremos.
Un hotel boutique no debería fallar en estas cosas tan basicas.
Es un hotel bonito y tranquilo para disfrutar de Albufeira. Es perfecto si se quiere descansar ya que está apartado de los bares, discotecas y el bullicio nocturno del lugar. Esta en una localización perfecta, cerca de la playa, en el pueblo, pero en una zona tranquila. Aunque si quieres ambiente en pocos minutos llegas andando a cualquier lado.
Las habitaciones están bien, están limpias, quizás se quedan un pelin pequeñas. Pero tienen un balcón muy agradable, y si te toca con vistas a la playa es estupendo.
Lo que más nos gustó de este hotel es que tiene un salón con terraza y piscina maravilloso, en el que sirven el desayuno, comida y demás. Es un salón con una cristalera enorme con mucha luz, lo dejan abierto para que haya fácil acceso a la piscina desde la que se ve la playa. Tiene unas vistas muy muy agradables. Desayunar/ comer aquí era un placer, disfrutar de un rico helado, una ensalada fresca...mirando al mar y respirando tranquilidad desde la tumbona, es una auténtica maravilla!
El personal es muy amable. En Portugal siempre encontramos gente simpática y cercana. Aunque habrá de todo, como en todas partes :D