Acostumbrados a llevarnos la paella a casa para comer, de todos los tipos y todas muy ricas, hechas a leña que le dan su punto, el pasado día 1 de Enero, para celebrar el Año Nuevo con unos amigos, fuimos a comer una "Paella del Senyoret" y ¿cual fue la decepción?, pues que a pesar de decir que nos dejaran la paella en la mesa, cuando vinieron a enseñárnosla, para comerla directamente y servirles a los niños, nos dijeron que NO, que por decisión de la empresa la Paella se la llevaban y la emplazaban en cocina para no ensuciar la mantelería, cuestión que desconocíamos a pesar de estar acostumbrados a llevárnosla a casa y eso que por comerla allí nos cobraran más del 50% por ración...

Otro de los puntos negativos fue que nos sacaran "All i Oli" en sobrecitos, que para un "Restaurante" de este supuesto prestigio quizás quedarían mejor si lo sirvieran, aunque fuera de sobrecito o industrial, en recipientes individuales...

Bueno, quizás una mala experiencia, que esperamos que hayan tomado nota tras haberlo hablado personalmente hoy con el local.

Sitio no recomendado a día de hoy para comerse una Paella insitu, quizás deberían de cambiar la carta y adecuarla a la realidad y bien poner "Plato de Paella" o "Paella emplatada" ya que lleva a confusión, más cuando cobran 16€ por ración.

Esperamos que lo solucionen para el futuro.

Fuimos en familia y el local muy bien con terrazas interiores muy comodas,la comida estuvo muy bien en líneas generales tanto el arroz para los niños como los platos principales y entrantes pedidos, excepto el chuletón que aunque teniendo buen sabor era todo nervios y tendones poca carne,trato muy amable y correcto en todo momento,precio medio-alto ,hacen paellas a leña para llevar

Estuvimos muy cómodos porque estamos en un salón cerrado para nosotros y la verdad que nos permitió hablar. Pedimos una paella de arroz del señoret espectacular el arroz en su punto y con muchos tropezones el trato muy correcto volveremos

Restaurante con buenísimas instalaciones , producto selecto y de calidad, su dueño Anselmo siempre pendiente de sus clientes.
Muy buen lugar para celebraciones.
Las paellas exquisitas.

Estuvimos el pasado sabado 22Feb gracias a un cupon regalo de unos amigos y la verdad es que nos encanto por todo ( lugar, trato camareros, comida, etc..). De primero nos pusieron Croquellana artesanal de Morella en cazuelia individual , nunca la habia comido y estaba muy rica, luego nos pusieron una Tosta de sardinas con guacamole que estaba brutal , deliciosa y sabrosa, a continuacion Bocadito de calabacín, queso cabra y crujiente de cecina que la verdad esa combinacion es de 10 el sabor del queso cabra de los que me gustan a mi. La Paella de Confit de pato tambien estaba de 10 , el arroz en su punto y equilibrado de sabor con el pato, para repetir. Nuestra hija se pidio un entrecot de vaca rubia gallega que estaba jugoso y en su punto acompañado de patatas fritas. De postre nos pusieron Mousse de Chocolate Belga muy rico y fruta variada. La verdad que volveremos a repetir, chapo a los cocineros, camareros muy atentos y agradables, el sitio muy tranquilo y encantador.