Será todo lo legal que quieras, pero te cobran 1,5€ por persona por el servicio . Cuando preguntas te dicen que es por el trocito de tortilla de patatas fría que te ponen antes de comer y que no has pedido .

Me gusto mucho y los Calcots estaban muy buenos, la bustifarra fresca, los vegetales excelentes, las raciones suficientes, la atencion estuvo a la altura, el vino muy bien
Volveremos pronto

Experiencia muy mala. El servicio horrible y la comida sin más, sobre todo para el precio que tiene. Muy poco recomendable. La finca y el restaurante son bonitos.
Tardaron muchísimo en servirnos (aprox .20 minutos para traernos sólo las bebidas), los platos principales venían por tandas con muchísimo retraso, con tanta diferencia de tiempo que el primero de los principales ya lo habían terminado cuando trajeron otros dos, y al rato el resto de los principales. faltaba por servir una persona y, habiendo acabado ya toda la mesa, nos dicen que se han equivocado y no les quedan chuletas de cordero, que habían hecho un chuletón en su lugar porque lo habían apuntado mal y que si nos lo queríamos quedar cobrándonoslo. Visto lo que tardaban en traer cada plato no nos daba tiempo a pedirlo y esa persona se tuvo que ir sin comer. Qué menos que siendo su error y después de 1h40 de comida esperando cada plato, hubieran pedido disculpas y nos hubieran ofrecido quedarnos el chuletón sin cobrar para que la persona pudiera comer. En su lugar se ofendió cuando le propusimos quedarnos el chuletón al precio de las chuletas que habíamos pedido. Algún que otro cubierto y vaso sucio (que por cierto, volvieron a traernos después, lo que me hace plantearme mucho la limpieza del sitio). No volveré

Para las cantidades que ponen y la calidad m parece que los platos son bastantes Caros, no nos ha gustado , los camareros muy amables, pero vamos q no vamos a repetir

Segunda vez que volvemos y quedamos encantados. El entorno es de lo mejor que hay por la sierra norte de Madrid para pasar un dia agradable con familia. En nuestra primera visita tomamos de primero unos huevos con morcilla y habitas muy buenas, croquetas caseras que se desacian con el primer mordisco y de segundo un solomillo acompañado de unas patatas cocinadas al estilo pobre muy buenas tambien, los niños comieron el menu infantil que en relacion calidad precio cantidad es acorde. Este fin de semana hemos probado los calsots de temporada, un plato tipico de la gastronomia catalana mediterranea cocinados a la brasa en su justo punto. Lo recomiendo!!