Somos una familia de 4, con 2 niñas de 12 y 14 años. Pasamos una semana en casa bambú.
Desde todos los puntos de vista hemos tenido una estadia excepcional. La casa está junto a una magnífica playa donde nos pudimos bañar e iniciarnos al surf.
La acogida del dueño Kirk y del manager William fue muy agradable y profesional. Un placer!
La casa nos gustó mucho, tanto por su construcción original de bambú, como por tener todo lo necesario (equipamiento, cocina, calidad de las camas, etc).
El manager, William, experto guía, nos llevó a visitar la jungla de noche y ver las tortugas. Una experiencia inolvidable!!
Bravo a Kirk y William por proponernos esta singular experiencia.
Sophie, Pablo, Lou y Nina

Aparecimos por casualidad en la casa, buscando una habitación para pasar tres días, y ha sido lo mejor que nos llevamos de todo el país.

Sin duda la casa linda es toda una experiencia; es cómodísima, limpia, acogedora, con todos los servicios necesarios, tiene unas vistas maravillosas del mar, la cama es estupenda, los amaneceres todo un regalo, la banda sonora que nos acompaña espectacular...

William ha sido muy amable y discreto, servicial, atento.
Para nosotros, visitar la zona de Corcovado ha sido lo mejor de las vacaciones, ya que la naturaleza es exuberante, no tan explotada como otros lugares y las playas son salvajes y desiertas.

Sin duda, recomendamos este lugar a toda persona que busque un entorno tranquilo, natural en plena selva y primera línea de playa Pan Dulce, y en contacto con toda suerte de animales que te vienen a visitar. Y repetiremos, porque no hemos podido visitar el parque a fondo y nos hemos quedado con las ganas.
Muchas gracias ha sido un deleite de pura vida!!!

Pasamos unos días con la familia en esta hermosa, supercomoda y ecologica casa. Una distribución de la casa muy comoda. La cocina con una isla de trabajo perfecta comunicada de forma abierta con el comedor y a traves de una gran puerta con la terraza es magnifico. Las 3 habitaciones una en el piso superior y las otras 2 con baño en el piso inferior son muy comodas, con amplias camas con protección contra los insectos. La simplicidad con todo lo necesario es la caracteristica de la casa. No tuvimos problemas con la capacidad de la nevera ni con su capacidad de conservación. Los ventiladores nos dieron frescor siempre suficiente.
El emplazamiento de la casa es maravillo, en un paraiso con un corredor con vista al mar...la visita constante de animales, cada mañana venia un tipo distinto de monos a comer de los arboles frutales que rodean la casa, decenas de lapas surcaron el cielo esos dias y la mas grande iguana que he visto subió a lo alto de un arbol a descansar.
Uno ha de sabe a donde va, aqui no hay reloj solo el tiempo de la luz solar, hay que convivir con el sonido de la selva y disfrutar de la naturaleza en su totalidad,
Los servicios ofrecidos por William, son perfectos, siempre atento y proponiendo cosas interesantes. La visita del parque de Corcovado que con él hicimos, de mas de horas, fue sensacional, una increible cantidad de animales y de historia sobre el oro, con un contacto intenso con la naturaleza. Que mar más intenso y bravo!!
Los niños disfrutaron como nunca, gran lugar, volveremos.