El Lobby es hermoso. La habitacion amplia y con una vista genial, desde el piso 10. Ocurrio algo raro en Eilat, llovio. El balcon se inundo, pues no tiene desague y la entrada de la habitacion, tambien, el agua venia del techo. la lluvia paro y todo se seco. La cortina para tapar el sol, no era sufucientemente ancha, por lo tanto, nos despertabamos con los primeros rayos del dia; y para concluir, el lugar donde desayunamos (es provisorio) y nada agradable, el desayuno, si es variado y copioso. Luego de desayunar 4 dias consecutivos, decidieron que no estabamos en la lista, y nos mandaron a la recepcion, luego de algunas insistencias, pidieron disculpas, pero ya no teniamos apetito. Conclusion, no todo lo que brilla es oro!!!!!!