La mejor ecuación calidad precio. Buen servicio, platos de buen tamaño y siempre lleno. Con familia, amigos o negocios, es un buen lugar.

Nos pareció excelente la comida, con gran variedad. Platos bien elaborados y servidos. Mayormente abundantes, incluso los postres. Seguramente un lugar para volver. Buen servicio y atención.

La comida re rica. Comimos parrilla y la verdad todo barbaro. Fue almuerzo de trabajo. Todo llegó rápido. Volvería otra vez seguro.

Éramos tres, el pescado estaba en mal estado, la Milanesa de pollo cruda literalmente y la ensalada de langostinos negra la lechuga que tuve que dejar toda, y los langostinos quemados. Un desastre todo. La moza pobre la tuvo que remar como podía.

Riquísima cena en este restaurante.
Pedimos chorizo, bife ancho, y boniato con Roquefort. Todo muy bien preparado con un servicio excelente.
Los precios de las bebidas son caros, pero como en muchos otros restaurantes de la ciudad.
El restaurante dispone de dos plantas y el ambiente es muy bueno en ambas. En la planta baja se encuentra la parrilla donde van cocinando todas las carnes.