Los bungalows siguen teniendo todo lo necesario, son espaciosos y permiten disfrutar con independencia del resto de los pasajeros. Las piscinas excelentes; una más fría, solamente tibia para las horas de más calor, y la otra bien caliente con la temperatura del surgente termal, tal como debe ser. Muy bien cuidados como siempre los jardines. Deberían mejorar la ambientación de la parte techada de la piscina caliente: sacar las reposeras que son muy grandes y caben pocas, y colocar sillas y mesas y percheros para las batas (así cuando el tiempo está feo más personas pueden utilizar ese espacio). En cuanto a la atención, este año me negaron la elección del bungalow (me gustán más los más antiguos por el tamaño del porche); había muchos vacíos pero me dijeron que estaban reservados y que si ocupaba uno lo tenía que dejar el sábado (era domingo y nos íbamos a quedar hasta el martes de la semana siguiente -9 días-), por lo que resigné y acepté el que me asignaron, Luego muchos de esos bungalows fueron ocupados por parejas brasileñas que llegaron el sábado en la mañana y se fueron el domingo en la tarde; resulta difícil entender que me lo negaran para 9 días de estadía y lo reserven para un día y medio. En el desayuno siguen faltando productos light, como la leche descremada...

El lugar es lindo pero mal administrado. Uno de los días encontramos un vidrio encima de la cama luego de que fue limpiada, a la habitación le entraba agua por la puerta los días de lluvia llegando hasta el comedor, otro día pusieron un inflable para niños en pleno sol del mediodía y una niña salió llorando por lo caliente que estaba, la higiene del baño no es buena. La foto con el trapo abajo de la puerta para que no entre el agua, lamentable.

El personal muy cordial , te atienden a cada momento , están atentos a lo que se le solicita. Viajamos en familia y todos quedaron muy conformes , volvería al mismo lugar en las termas del Arapey (Uruguay)