Nos hemos alojado en kempinski Aqaba en Noviembre 2023. Tras estar en Aman,petra y el desierto viajamos una pareja y un niño de 3 años.
Teniamos duda y miedo de venir a la zona al principio luego unos amigos que justo han estado dias antes nos han animado.
En lo que Respetar al hotel ..estamos completamente impresionados y satiafechos .
Ha sido una acogida estupenda dedde que llegamos al hotel.
Nos ha llamado la atencion el nivel de seguridad.
La amabilidad del personal al llegar y en recepción.
Nos han preparado la habitación antes de tiempo ya que llegamos a las 13h.
La habitación es espectacular no le falta un detalle en absoluto.
Una vez en la habitación han venido con fruta como detalle de bienvenida nos han llamado a preguntar si faltaba algo varias veces.
Las instalaciones del hotel ,las piscinas ,la playa privada, el restaurante espectacular. El desayuno super completo todo a un alto nivel exquisito.
Un detalle que nos han encantado es que todas las noche han refrescaso la habitacion preparado la iluminacion para dormir y yekto a dejar la cama en posicion de descanso.
En recepción Fatima una empleada marroqui ha sido muy detallista y pendiente de nosotros durante toda estancia. Tambien el lersonal de la piscina un chico egipto y otro del deaf sea fueron muy atentos y detallistas.
Para no exceder mas este hotel es el sinonimo de relax de cuidado de los empleados fe limpieza y a pesar de loq ue esta pasando en paiaea vecinos Aqaba esta muy tranquila y segura y los jordanos como pueblo son muy amigables y atentos y se aseguran que no te falta detalle.
Estamos deseando volver y volveremos.