Disfrutamos mucho nuestra estadía en el hotel Ocapora.
Las instalaciones se reflejan bien en las fotos que otros usuarios subieron. La habitación es muy linda. Destacamos la ducha y la cama, ambas muy grandes y cómodas. Hay tele, pero pocos canales, todos en portugués y varios religiosos. Igual uno no va a ver tele.
Hay mucha humedad y la ropa no se seca rápido: recomiendo llevar más de una malla y varias prendas para el día.
En relación con la comida, ésta fue muy variada, aunque obviamente había alimentos que se repetían, como arroz y papas. Hay menú para niños y varias cosas muy interesantes para probar. Por las noches hacen menúes especiales, como noche parisina, italiana, brasilera. Los desayunos y las meriendas son más iguales y repetidos, pero muy ricos. A la mañana hacen tapiocas, que son deliciosas.
Cabe aclarar que la mayoría de los platos son brasileros: hay caldos, variedad de peces y frutos de mar.
Solo los desayunos tienen los nombres de los platos traducidos. Sugiero modificar esto, ya que hay varias palabras que no son transparentes.
En relación con el personal, todos fueron muy amables, aunque no hablaban ni intentaban hablar español, ni siquiera para ayudar cuando uno no entendía qué estaban sirviendo. Esto no impidió que pudiéramos comunicarnos y pedir lo que queríamos. Todos muy cordiales.
Lo único negativo que tenemos para decir es en relación con el entretenimiento. Todo está pensado para el brasilero, y los animadores no se acercaban a quienes hablábamos español. Solo una vez una animadora nos incluyó en un juego, y fue muy agradable.
Hay actividades para niños, pero también en portugués, lo que excluye a todos los que no hablan ese idioma. Entendemos que parte de sus huéspedes son brasileros, pero, para bien o para mal, hay mucho hispano parlante que también quiere ser incluído en las actividades.
Finalmente, en relación con el bar de la playa y la atención en la playa en sí, creemos que puede extenderse hasta las 17 horas, y el bar podría arrancar antes. Hemos bajado a las 13 hrs y no quisieron armarnos una sombrilla y reposera porque ya subía la marea, cosa que no era tan así. A nosotras en particular no nos trató muy bien el encargado de poner sombrillas y reposeras, pero no vimos que con el resto fuera igual.
En resumen, volveríamos a elegir este hotel!!!