El hotel está en una ubicación maravillosa, frente a la playa y a pasos de los paseos de compras y buenos restaurantes. La atención del personal es muy amable y dispuesta. El único detalle que tiene (que supongo es por la edad del hotel) es que el baño de la habitación, en especial la ducha, es pequeño, si es una persona grande puede ser incomodo. La habitación es muy bonita y cómoda, algo pequeña también pero no es molesto, cuenta con frigobar para uso en la estadía. Aire acondicionado y ventilador para más comodidad. Cuenta con un parking para autos un poco pequeño también pero es u a buena opción. La vista del balcón en segundo piso es maravillosa, uno puede sentarse a la noche y ver toda la costa y el cerro San Antonio iluminado, simplemente maravilloso. Volveremos a ir porque aún con ese pequeño detalle la estadía fue muy cómoda y segura.

Muy lindo hotel, bien ubicado frente a la playa y a pasos del centro comercial de Piriápolis. La terminal de autobuses está a 5 minutos a pie. El personal del hotel es muy amable y atento. Recomendable.

se trata de un hotel familiar no lujoso pero cómodo tanto en su ubicación como en la atención, proporcionan sillas y toallas para cruzar a la playa. desayuno adecuado disfrutando hermosa vista, muy rica la ensalada de frutas.