Estar en la selva rodeado de animales fue una experiencia verdaderamente excepcional. La conexión con la naturaleza y la vida silvestre en su hábitat natural es algo indescriptible. Además, el hotel donde nos hospedamos era un verdadero paraíso, ofreciendo una experiencia única que combinaba comodidad y lujo con el entorno natural. El servicio del hotel fue impecable, con un personal siempre atento y dispuesto a hacer que nuestra estancia fuera memorable. La calidad humana de las personas que trabajan allí es incomparable, siempre con una sonrisa y listos para ayudar en todo lo necesario.
El clima durante nuestra estancia fue perfecto, lo que permitió disfrutar al máximo de todas las actividades al aire libre y relajarnos sin preocupaciones. La piscina del hotel merece una mención especial; es incomparable, tanto por su diseño como por su ubicación, ofreciendo vistas impresionantes y un ambiente de total tranquilidad.
En resumen, la combinación de la experiencia en la selva, el lujo y confort del hotel, el excelente servicio y el clima perfecto hicieron de esta una escapada inolvidable. Es un lugar que recomendaría sin dudar a cualquiera que busque una experiencia única y rejuvenecedora en contacto con la naturaleza.