Excelente servicio, gracias a Lourdes, Lucas, Carolina, Leandro y creo que me falta un chico que estaba en la noche. Todos por lejos muy amables, dispuestos a dar información sobre todo lo que uno quería saber. Hubo un día que no quisimos salir a comer porque estábamos agotados y Lourdes muy linda nos ofreció pedir comida a domicilio, nos recomendó unas empanadas espectaculares y ella misma llamó y pidió por nosotros. Las habitaciones un agrado! Amplias, acogedoras, calefacción por piso que era buenísimo, balcón y mini cocina con lo necesario para hacer algún aperitivo. Nos cambiaron dólares por pesos argentinos todos los días sin aprovechar como lo hacen otros hoteles, el desayuno a la cama un 10. La ubicación muy buena, al lado de diferentes bares y restaurantes y de un outlet bastante atractivo también. (Vayan a la Cabrera y a las cabras. /la Cabrera es más cara pero vale la pena, las cabras muy rico y buen ambiente) los 2 están muy cerca del hotel.
Gracias por todo. Fue una estadía muy agradable. Y gracias Carolina por dejarnos hacer el check out un poco más tarde!