Lo volvimos a elegir por su cercanía con el Hospital Italiano, y fuimos 2 veces en 10 días (1 noche cada vez). Es ideal para quien deba atenderse en el Hospital. Es sencillo, la limpieza es buena, y la atención es correcta.
Lo que nos pareció mal es el desayuno, sobre todo de la última estadía. Hubo un cambio, y ahora los sábados y domingos el desayuno se comienza a servir a las 8AM (los demás días es a las 7:30). Nosotros debíamos estar en el hospital a las 9 hs, con lo que el desayuno a las 8 ya nos quedaba un poco justo. Pero el problema es que a las 8 el café estaba frío, nunca se llegó a calentar, las medialunas y vigilantes estaban secos (del día anterior?). Así que recomiendo al hotel repensar esa política de horario de desayuno, y si van a comenzar a las 8 hs, que a esa hora ya esté todo preparado.

Elegí la cadena de Tribeca Hoteles por buenas experiencias que tuve años atrás, reservé en diciembre de 2018 mi estadía con la intención de festejar un aniversario, a mi pesar tuve una horrible experiencia en este establecimiento. En principio las fotografías expuestas en el portal hoteles.com y tripadvisor.com no concuerdan en lo mínimo con el estado real del hotel hoy en día. Nos realizaron ese día tres cambios de habitaciones, tuvimos esperas prolongadas para solucionar mi caso incluso nos atendió el gerente/supervisor de ese hotel. Si bien no es responsabilidad del personal contratado reclamo por esta vía se lleven a cabo refacciones urgentes en el establecimiento, las habitaciones que me mostraron estaban repletas de humedad, con manchas en las paredes, rayones de mesas, bienes de uso muy viejos incluso televisores. Fue realmente una experiencia para olvidar, con una relación precio-calidad pésima me cobraron alrededor de 33 dólares más el 21% de iva por ser residente local promediando unos 40 dólares = 1558 pesos argentinos al cambio de la fecha. Por el otro lado, destaco como positivo el desayuno y la variedad de alimentos que tuvimos a disposición. La atención del personal fue cordial durante la estadía, se los notó agotado intentando solucionar menesteres que claramente les excede. Cabe destacar que el hotel no brinda ningún amenitie, a tener en cuenta, solo puso a disposición dos jabones chicos blancos perfumados en nuestro baño. Los aires acondicionados funcionaron correctamente, las habitaciones cuentan con servicio de tv disponen de televisores muy antiguos. Chequeen personalmente este establecimiento antes de reservar, de lo contrario, se llevarán una muy mala experiencia como fue en nuestro caso.

La atención de los dos chicos que me atendieron fue muy buena.
Estuve una noche, en verdad fue bastante desagradable: colchones, sabanas, toallas y acolchados son muy viejos, lavados con una lavandina fea y feo olor.
El aire acondicionado parecía del año 1990 por el ruido y el mal estado en el que estaba (pegado con cinta adhesiva).
Al llegar había media botella de agua saborizada abierta en el frigobar. Automáticamente avisamos a la recepción para dar aviso.
No te permiten fumar en los balcones de las habitaciones (una boludez!)
El desayuno muy normal, no tenía buen aspecto pero zafaban algunas cosas.
Me disgustó mucho el tinte político del hotel, con imágenes de Eva Perón, Che Guevara, entre otros.
No lo recomiendo y no me volvería a alojar allí... Buscaré otra opción por la zona!