El hotel está muy bien ubicado sobre Corrientes, cerca del centro, a dos cuadras de la estación de subte Medrano de la línea B, a pocas cuadras del Abasto y del Hospital Italiano.
Tiene un amplio Hall y las habitaciones son amplias y cómodas. La habitación nos hacían todos los días y nos cambiaban las toallas. El desayuno está bien, tenés en las mesas unas listas con lo que ofrecen, uno marca y la moza se lo trae.
Tener en cuenta: la piscina no estaba habilitada en esta fecha porque estaba en reparación. Tienen poco espacio en la cochera y es solo para autos chicos. Nosotros optamos por dejar el auto en una cochera de la zona. El horario del check in, veníamos del interior, llegamos antes y nos hicieron esperar para darnos la habitación.