Lo mejor del hotel son la ubicación y el trato del personal. La limpieza estuvo bien, pero la calidad de la habitación lo desmereció mucho. El trato del personal es bueno (se acomodaron al pedido de poder quedarnos en el hotel hasta que partiéramos de retorno) y la ubicación es muy buena (a 50 metros del balneario/parador Hemingway) lo cual es muy bueno. Lo que no gustó fue principalmente la habitación. Me dió la sensación de que por ser una reserva realizada por una app me dieron la peor habitación. La relación precio/calidad de la habitación no es buena, más bien bastante mala. Pagando el equivalente a U$S818 (impuestos incluidos) por 5 días debería haber recibido algo bastante mejor. El mantenimiento general es malo y el cuarto que recibimos estaba hecho con materiales de mala calidad, que han ido remendando a medida que se deterioraban, sin solucionar los problemas de fondo. Había manchas de humedad en las paredes, marcos de las puertas deterioradas, y otros signos de falta de mantenimiento. Los baños están mal diseñados y los artefactos son de mala calidad (durante mi estancia se rompió la bacha y el inodoro del baño principal). La impresión es que no aprovecharon la cuarentena para hacer un mantenimiento del lugar. Finalmente, como nota adicional, podrían poner mosquiteros en las ventanas, ayudaría con la invasión de mosquitos que tiene la zona.