Este hotel se caracteriza por la cordialidad y amabilidad del personal. Las habitaciones son amplias y espaciosas, con una espectacular vista al parque. La piscina, con muy buenas dimensiones, está siempre limpia. Hay reposeras y sombrillas para ubicarse en el amplio parque. El desayuno (incluido en el precio de la habitación) es correcto, cuenta con lo básico e indispensable, tostadas, dos variedades de facturas, cereal, yogur, jugos, fruta e infusiones. (y unos sconcitos deliciosos que preparan en el lugar) Cuenta además con restaurant que sirve almuerzo, merienda, cena y tragos a toda hora. Todo exquisito, preparado en forma casera y con mucho esmero.Gran ambabilidad del personal del restaurant.!! El descanso es excelente, silencio total, un lugar para encontrar la paz. El dato central, "solo para adultos", sin niños. Es pet friendly asi que es maravilloso verlos corretear por el parque. Las habitaciones superiores cuentan con espacio para estacionar el coche con media sombra. La conexion de WIFI es muy buena!!