Cabanas super recomendables. Se encuentran un tanto alejadas del centro pero en uno de los lugares mas lindos de Tandil -Don Bosco-, ubicadas en una esquina y termina en una calle sin salida, por lo que es muy limitado el movimiento de autos. En nuestra cabana (los ciruelos) enfrente teniamos hermosa vista con varios caballos pastando, casi como en el campo. El ingreso es con un porton con control remoto muy practico, posee un parque hermoso con mucho verde, plantas, flores , muy bien mantenido. No usamos la pileta por la epoca que estuvimos , pero la conocimos y es hermosa, y ya estaban por inaugurar un spa para todos los huespedes. La cabana con todo lo necesario y decorada con muy buen gusto, amplio bano , linda habitacion, comoda cama y almohada . La atencion esmerada y destaco a Gian Franco por su amabilidad. Rico desayuno en la cabana, medialunas, tostadas, dulces caseros.
Precios acordes al lugar.
Aspectos a mejorar, podria ser mejorar desayuno, en jugos y reemplazar leche en polvo.
Y tambien la comunicacion por wasap , telefono, mail, en cuanto a los tiempos de respuestas.
No obstante esos detales recomiendo totalmente el lugar y volveria nuevamente.
No deja dudas